martes, 16 de septiembre de 2014
Es muy importante en los criterios y en el carácter lo estable y seguro
que se pueda mantener ante las dificultades; la constancia, energía y valor para
consolidar la firmeza en las acciones da seguridad y expresa el carácter definitivo
en la determinación de la acción. Si todo ello lo acompañas de bondad, es decir,
de esa inclinación natural a hacer el Bien, impregnando de dulzura, afabilidad y
suavidad de expresión, da calidad de bueno y adecuado todas las acciones que
se necesiten emprender para alcanzar el logro en la acción.
Entre las cualidades que JESUCRISTO quiso enseñar a la humanidad,
está “LA BONDAD”, que unido a “LA FIRMEZA”, y a “Su CRITERIO” marcó el
“CARÁCTER” valiente, generoso y humano que lo habría de caracterizar a través
de los siglos, dejando su vida libre de cualquier doctrina que no fuese el “AMOR”
a DIOS, Y COMO CONSECUENCIA A TODO LO QUE CREÓ.
Hay que tener cuidado con los “adoctrinamientos” que ciertas personas
pretenden inculcar a los niños y los jóvenes; no se puede confundir la
agresividad con la firmeza, ni tampoco el sometimiento a la esclavitud ideológica
personal, por mucha representación y cargo religioso que se ostente, ni tampoco
el lugar donde se camuflen ciertas actividades religiosas, mezquitas, iglesias...etc.
El hombre no nace Santo, ha de hacerse y para conseguirlo ha de mostrar el
Amor por encima de cualquier circunstancia o condición, y con la soberbia, la
ira, lujuria, envidia, odio, rencor....., todo aquello que te aleja de DIOS y su
primer mandato:
AMARLO A ÉL Y AL PRÓJIMO POR ENCIMA DE TODO.
OS QUIERO... AMADO.
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