sábado, 30 de julio de 2016
Han quedado muy atrás los piratas que surcaban los mares en busca de
codiciados botines y del lugar donde pretendían esconderlo fuera de la vista de
todos los demás, que como él se dedicaban a la piratería y a descubrir tesoros
ajenos. La codicia siempre insaciable les llevo a ser conocidos y temidos nada mas
nombrarles.
Hoy en día la piratería tiene muchos campos de actuación, y uno de los
mas temidos son los de redes de comunicación, donde hay grandes expertos de la
informática, que sin moverse de sus casas, trabajos, lugares propicios ..., navegan
y navegan como buitres en busca de carroña y de inocentes que dejaron por unos
momentos su privacidad a merced de las redes, sin percatarse de los peligros de
aquellos que escondidos tras un anonimato y con la máscara de la hipocresía
esconden su falta de ética y carencia de valores humanos.
El yugo que utilizan para extorsionar a sus víctimas es el símbolo de su
maldad que izan como bandera de su dominio, haciéndose fuertes ante la
debilidad del otro que se ve indefenso. El botín alcanzado no tiene precio
comparado con el daño que originan a sus víctimas que humilladas ante su familia,
sociedad..., pierden el respeto y las ganas de vivir.
De los grandes piratas ya se encargan las instituciones
correspondientes, es de estos otros que creyéndose intocables acechan y
destruyen lo que tenemos cerca y pensamos que esta a buen recaudo, sin
percatarnos que vale un recodo o una esquina para depositar un hombre perverso
que acecha nuestros mas valiosos tesoros sin escrúpulos ni medidas que los
puedan paralizar; seamos guardianes de verdad y no descuidemos lo que tanto
nos interesa.
OS QUIERO ... AMADO.
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